Abajismo o GUACHACA.

Abajismo o GUACHACA.
Si uno decide hablar de este tema ahora y no desea ofender a nadie mas fácil es ignorarlo, después de todo , es probable que este sea uno de aquellos conflictos propios de una epoca sin características propias , una especie de transición histórica donde todo viene o va para alguna parte , una pausa cultural, un asunto lingüístico de tercera , pero a pesar de todo inevitable ; el comunista es socialista, el socialista es demócrata , el demócrata un centrista , el conservador independiente, las coristas son modelos, El escolar rebelde un pingüino, el delito un ilícito el pueblo es la gente, y los gorilas ya no existen.

Es por decir muy poco , rarísimo , que arquetipos antropomórficos del todo indiscutiblemente lindos por fuera, y en el caso de Karen Doggenweiler, y otras distinguidas candidatas , también al parecer por dentro , sean , no solo genuina, si no ademas, la máxima representación de un , guachaca , que es, en el indeseable pero común lenguaje de desprecio por los mas pobres, la evolucion del cuma que a su vez asciende del piojento , el peliento o del perejil , y todos descendientes del roto.

Alguien tiene que estar bromeando , o tomandole el pelo a medio mundo, por años.

Es por supuesto posible , que con una incalculable cantidad de inocencia , uno pueda darle algún crédito , a la teoría que sostiene que un guachaca, en este caso una reina guachaca , cuyo " profile ", es inmensamente mas próximo al convencional y definido por la gente , como el de una cuica , es en realidad una guachaca de corazón, Ok, pero aun así , quedan colgando una enormidad de interrogantes.

Aquí , mas que un pensamiento propio , esto me viene a la mente , recordando pasajes de un ensayo del periodista Oscar Contardo, titulado Siutico , que me regalara recién publicado , una muy querida hermana mía , es que Karen mas que la reina guachaca , no es lo mismo, que la reina de los guachacas , o es que como lo dice el mencionado libro, la reina del abajismo , o es que seria posible , o apropiado, que una hermosa y esforzada comerciante de feria libre, que con su pintora floreada y que a grito pelao' ofrece sus tomates , para alimentar sus cabros con la dignidad de su oficio, resultara elegida reina cuica , por mas que el concurso, o elección , .contara con el nada imparcial pero contundente patrocinio de televisión nacional , yo por lo menos no lo creo , ni parecen creerlo , todos , a quienes en una encuesta de alcance personal, o en los posteos aparecidos en blogs o periódicos dedicados al tema últimamente .

Es esta mansedumbre ciudadana que por meses soporto los cantinflescas letanias y defendió unánime todos los capítulos de un misterioso e indeciso Marcelo Bielsa, o a los cientos de miles que deben dejar de asistir a los estadios porque los desmanes los provocan otros, o quienes  deben dejar sus vidas en un humillante compra huevos por multas a infracciones de antiguos dueños, es en realidad una resignación colectiva e incondicional muy peligrosa.

Hasta donde es sociológicamente sano dejarse manosear por jugarretas terminológicas al borde del menoscabo , en un perimetral coqueteo Con el estereotipo, o al menos , una solapada trivializacion del problema histórico de intolerancia en una sub cultura de castas, que por lógica endogamica de clases, o por obligación, viven los miembros de la sociedad chilena , sean estos mezcla indígena - andaluza , o europeo - vasca .

Confundir y publicar libremente caricaturas tipológicas indolentes o emplear epítetos peyorativos con la intención de humillar a quien es considerado inferior, es una constante amenaza para la unificación patriótica de la que gozan naciones desarrolladas, donde por otro lado , por mucho menos , personas irían a la cárcel , porque aunque cueste creerlo , en otras latitudes, la discriminación de origen clasista es considerada criminal.
Por cierto , esta criolla y enraizada mala costumbre en el abuso y el desprecio, a menudo parte del guión de tele teatros nacionales , tales como el chulo , el rasca o el mucho mejor ponderado pero cuestionable y semi cariñoso calificativo de nana , que uno no sabe cuando se lo usa para dar respeto, o cuando para obtenerlo, son aun inofensivos, si lo comparamos con la risa que produce la caída de alguien en las calles, o las rutinas humorísticas insensibles , basadas en gangosos, homosexuales, cojos, tartamudos y otros seres humanos con desafíos adicionales en sus vidas , del uso de términos de pretendida connotación hiriente o xenofobica, como indio , negro , picante , flaite, cholo, ni hablar .


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