domingo, 28 de agosto de 2011

Sebastian Piñera, Camila Vallejos y la historia de Chile.

En esta atmósfera de incertidumbre ciudadana , donde claramente,  la gobernabilidad se desdibuja en un intento por mantener una imagen de institucional normalidad, La gente no recibe un mensaje oficial amarrado a una dirección única , como ocurre en cualquier Pais del mundo,  donde impera el presidencialismo, los intendentes dicen lo que se les da la gana, lo mismo hacen los ministros, el vocero se enreda en conatos innecesarios que lo obligan a improvisar disparates o a tratar,  de corregir los ajenos , los parlamentarios de oposición por otro lado, ayudan muy poco para que la opinión publica,  se enfoque , en el trascendental espíritu  que dio origen al conflicto social , todos , cual mas, cual menos, confunden a quienes impedidos por un bosque de opiniones , evitan la utilidad , de analizar mas a fondo el problema, como por ejemplo, lo hace el gobierno en este instante. Estamos prácticamente todos de acuerdo que el actual es un sistema , cuyas anomalías , han tenido un impacto irreparable en la educación y en el financiamiento de millones de familias chilenas , que aparte de proporcionar satisfacción al deseo de parecer de cientos de miles de estudiantes universitarios, todo lo demás , es deficiente,  y en no pocos casos , sencillamente un fraude, su proyección es de un devastador e hipertrofico endeudamiento que en el mejor de los casos,  nos dejara ademas, con una sobre población de profesionales destinados al abuso laboral o al desempleo crónico .

Curiosa y tristemente , este ambiente de polarización , permite entre otras cosas hacer pensar a la gente que los recursos económicos del Pais , y la sumatoria de recursos de los chilenos , son algo paralelo, cuando en realidad, para los efectos de la circulación de la economía , son esencialmente lo mismo, en otras palabras, el monto a distribuir no solo es limitado , si no ademas , depende del grado de generación de recursos que tanto el estado , como los particulares , puedan obtener por separado. Para los economistas , acostumbrados a un discurso en códigos que fascinan e interpretan complejidades inalcanzables para las mayorías, nunca ha sido de interés,  aterrizar teorías económicas , para hacerlas sencillas de entender por el ciudadano común, y como están las cosas, para muchos parlamentarios y periodistas.

El mismo dinero que la familia de los estudiantes tienen que ocupar en el pago de aranceles y créditos con intereses exagerados , pueden destinarse al consumo de otros bienes y servicios , dando una potencial inyección de recursos y una diversificación que estimule el dinamismo de una economía descentralizada , o de cascada, permitiendo mayor y mejores oportunidades de negocios y de trabajo a quienes sufren los efectos de una coagulación del circulante por una concentración de riqueza,  sin paralelo en la historia de Chile .

Desde luego uno no puede , ni debe,  esperar que quienes han visto multiplicar sus inversiones ,  quieran aceptar de súbito , un ajuste , o la simple eliminación de esta fuente de enriquecimiento personal. Así mismo , tampoco es sano , esperar que ciudadanos comunes ajenos al negocio de la educación,  pero convencidos que la proliferación de este tipo de sistemas , sean la razón que justifica sus logros , o del bienestar aislado de su sector  , no vean en una democratización del financiamiento y la educación publica , un peligro inminente que amenace el frágil confort a costa de una sociedad , cuya desigualdad , solo acumula energía de rebelión social , depresión anímica y una sobre carga que impide el despegue definitivo a nivel Pais .

Una economía mixta con énfasis en el desarrollo superior y anterior de las personas, es el camino que han seguido prácticamente todos los países desarrollados del mundo occidental . En nuestra particular experiencia , y fruto de muchos esfuerzos aislados , nuestro estadio de desarrollo se ha construido con lentitud , y van desde la creación de la CORFO, al de austeridad fiscal y equilibrio macroeconómico de la actualidad, ahora es de esperar que el presidente , de frente a la historia y nuestro destino común , recuerde que pase , lo que pase, Camila Vallejos con todo su incuestionable mérito , no será quien pase a la historia.


Luis Alberto Moya

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